
Mientras se define si el peronismo tucumano compite unido o fragmentado en los comicios nacionales, el Partido Justicialista (PJ) aplazó las confirmaciones del frente electoral con la posibilidad de incorporar un aliado estratégico al armado del gobernador Osvaldo Jaldo.
Distintas fuentes indicaron a LA GACETA que ayer por la tarde concurrió a la Casa de Gobierno el ex intendente de la Capital y líder del Partido por la Justicia Social (PJS), Germán Alfaro. Y si bien hasta cerca de la medianoche no hubo confirmaciones, las versiones coinciden en que el encuentro tuvo por objetivo dialogar sobre la inclusión de la estructura política del esposo de la senadora nacional Beatriz Ávila a la alianza electoral diagramada por el jaldismo.
Las conversaciones evidenciaron las tensiones internas en el peronismo. Por un lado, porque Alfaro -quien había acompañado en las boletas al radical Roberto Sánchez en las últimas provinciales- había sido el promotor de las demandas que frustraron en 2023 la candidatura a vicegobernador de Juan Manzur, hoy senador nacional, quien suele diferir en su voto en el Congreso con los diputados del bloque jaldista Independencia. Por otro lugar, la gestión del ex jefe municipal es especialmente cuestionada por la actual administración, a cargo de la intendenta Rossana Chahla. Así, los rumores sobre un acercamiento entre Jaldo y Alfaro agitaron todavía más los ánimos en el peronismo, que ya en 2021 había atravesado una dura interna entre sus referentes.
Hasta la próxima semana
Ayer se cumplió el plazo inicial de una semana que había fijado el Consejo provincial para la constitución del frente electoral que conformará el peronismo.
De todos modos, no se rubricó ningún instrumento para avanzar en ese sentido, indicaron fuentes del partido, y habrá que esperar hasta el lunes o el martes para ver si hay definiciones.
A comienzos de la semana, se había llevado adelante la primera reunión de la comisión designada por el Consejo por la cuestión de las alianzas electorales.
Los consejeros Fernando Juri, Carolina Vargas Aignasse, Hugo Cabral y Camila Khoder estuvieron junto a la apoderada del PJ, Ana Escobedo, y al consejero nacional Marcelo Caponio, para girar las invitaciones a los espacios políticos que estarán en el frente “Tucumán está primero”.
Según trascendió, existen charlas con armados como Acuerdo Federal (liderado por los hermanos Marcelo y Tulio Caponio), y Tucumán Avanza (de César “Kelo” Dip). A ellos se suma Libres del Sur, con llegada a los barrios de la Capital y encabezado por el ministro de Desarrollo Social, Federico Masso.
En la sede de Virgen de la Merced 157 afirmaron que también se cursó una misiva al Frente Renovador de Tucumán, el armado massista que tiene por interventor a Samuel Semrik, hombre de confianza de Pablo Yedlin. El diputado es uno de los principales promotores de la candidatura de Javier Noguera. Esta semana, Yedlin y Noguera protagonizaron una foto con la ex presidenta de la Nación y actual titular del PJ nacional, Cristina Kirchner. “Este panorama exige, hoy más que nunca, que todos los sectores que conforman el peronismo entiendan que la fragmentación partidaria es funcional a los que endeudan a la Nación, estrangulan la economía y asfixian a las provincias”, afirmó el taficeño tras el encuentro.
José Vitar, presidente de la Casa Patria-Tucumán, advirtió que el límite a la cohesión interna es “un proyecto que pretende ceder la soberanía nacional”, en alusión a la gestión de Javier Milei. “La unidad del peronismo tucumano solo tendrá sentido con un compromiso de respetar estos principios básicos: que el Gobierno provincial de Jaldo se encuadre en la conducción nacional del justicialismo, acatando sus directivas estratégicas; y que la lista de candidatos dé garantías de que llevarán adelante dignamente su rol de oposición al gobierno neoliberal de Milei”, indicó Vitar.